La llegada de las vacaciones siempre es un síntoma de conflictos entre padres e hijos, y ¿por qué surgen estos conflictos? A diario, pasamos de media menos de cuatro horas con nuestros hijos e hijas. El horario laboral, la jornada escolar, las extraescolares, los deberes, etc. y cuando llegan las vacaciones pasamos más de 12h juntos.
Llegados a este punto muchos padres y madres se dan cuenta qué no conocen a sus hijos lo suficiente, y surgen los conflictos, padres e hijos discutiendo, rabietas, llantos…
¿Qué podemos hacer? En Montessori Village siempre gestionamos los posibles conflictos que puedan surgir entre niñas y niños de una manera respetuosa.
¿Cómo gestionar los conflictos entre padres e hijos respetuosamente?
Para gestionar un conflicto con tus hijos debes tener bien claro cómo debes hacerlo y que siempre sea por una vía respetuosa. Si tus hijos no están habituados a mostrar sus emociones y hablar sobre ellas, el trabajo como padre o madre va a ser mayor. En cambio, si soléis gestionar las emociones en casa, la tarea va a ser más sencilla.
Cuando surge un conflicto es habitual que los padres se lo tomen a lo personal y acaben enfadados con el niño, chillando o diciéndole que deje de llorar. Si quieres resolver y gestionar sus emociones, te damos unos sencillos consejos.
- Aíslate, escucha tu voz interior, obtén la claridad, examina porqué te afecta que tu hijo tenga una rabieta. Una vez que lo hayas conseguido.
- Presta atención a tu hijo o hija.
- Escucha su rabia, su enfado.
- Garantiza la validación de sus sentimientos, empatiza con tu hijo o hija.
- Otórgale poder para soltar sus emociones, una vez conectados, resolver.
Lo más importante es conectar, que nuestro hijo sepa que estamos a su lado, que, aunque tenga un mal día, le queremos igual, y que le escuchamos. ¿Quién está sufriendo? Tu hijo. Ayudémosle a que sepa gestionar sus emociones con amor, respeto y compañía. De esta manera, conseguimos gestionar los conflictos entre padres e hijos.
¿Cómo evitar los conflictos en la familia?
La palabra clave para poder evitar los conflictos de una manera respetuosa, es “paciencia”. A continuación, te damos unas sencillas herramientas para evitar los temidos conflictos entre padres e hijos en verano.
Organizar las vacaciones en familia. Si son muy pequeños se les puede explicar dónde van a ir y qué vamos a hacer, tiempo de viaje, etc. si son más mayores, pueden proponer excursiones, juegos y menús.
- Reuniones familiares. En estas reuniones podéis organizar las vacaciones, hablad de las cosas que no os han gustado y de las que sí, y proponer soluciones a los conflictos.
- Rutinas. Sabemos que las vacaciones son para disfrutar y no tener horarios, pero intentad que haya un orden y que cuando el día varíe, comunicarlo a vuestros hijos, sed previsores.
- Estar presente. Simplemente, estar presente. Hacer actividades conjuntas, sea cocinar, hacer castillos en la arena, jugar a la pelota, organizar excursiones en familia, hacer la lista de la compra… la intención es que los niños se sientan parte de las vacaciones y que se diviertan.
- Comunicación. Hablad de lo que habéis vivido en el día, que os ha gustado y que no, es un buen momento de conexión.
- Soluciones y no consecuencias. Si surge un conflicto, buscar una solución conjunta. De esta manera, creamos en nuestros hijos herramientas para resolver y habilidades para buscar soluciones.
Con estas sencillas pautas para resolver conflictos entre padres e hijos conseguirás que tus vacaciones en familia sean un éxito. En las escuelas Montessori Village siempre resolvemos los conflictos de una manera respetuosa.
Recuerda: “paciencia, respeto y empatía”.
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