La educación Montessori, fundada por la Dra. María Montessori a principios del siglo XX, se distingue por su enfoque único en el desarrollo holístico del niño. Uno de los pilares fundamentales de esta metodología es el ambiente preparado. Este concepto no solo refleja una disposición física del espacio educativo sino que también incorpora una filosofía educativa profunda, diseñada para promover la independencia, el amor por el aprendizaje y el respeto por el entorno.
La educación Montessori, con su enfoque holístico y respetuoso hacia el desarrollo infantil, nos ofrece una ventana única hacia el mundo interior y las necesidades evolutivas de los niños. Al adentrarnos en el Segundo Plano de Desarrollo, que abarca de los 6 a los 12 años, nos encontramos ante un periodo de transformación fascinante, donde el niño, lejos de disminuir su curiosidad, amplía su sed de conocimiento hacia horizontes más amplios y complejos.
María Montessori, una pionera en el ámbito educativo, conceptualizó una visión única sobre el desarrollo humano, dividiéndolo en cuatro etapas esenciales que abarcan desde el nacimiento hasta aproximadamente los 24 años. Estos son conocidos como los Cuatro Planos de Desarrollo Montessori.
La elección de una escuela para nuestros hijos es una de las decisiones más importantes que tomamos como padres. En este contexto, la pedagogía Montessori ha ganado reconocimiento y, a la vez, ha generado ciertos mitos y malentendidos. En este artículo, desglosaremos las diferencias clave entre las escuelas Montessori y las tradicionales, y abordaremos los beneficios y características únicas del enfoque Montessori.
Cualquier ciencia tiene su propio vocabulario y terminología, y el método Montessori no es una excepción. Los Montessorianos comparten un conjunto muy específico de referencias, que son breves y concisas, pero que cada una evoca, el mundo del niño tal como lo describe María Montessori.
En un ambiente Montessori, se enseña a ser autónomo, para ellos en vida practica les enseñamos el uso del cuchillo. Los cuchillos siempre han formado parte de nuestra sociedad como objetos peligrosos y a mantener fuera del alcance de los niños. Se comienzan a utilizar con independencia a edades tardías y siempre bajo estricta vigilancia.
El ambiente Montessori en casa es fundamental si tenemos claro que es nuestra filosofía de vida, además de facilitar la autonomía de nuestros hijos. Para María Montessori era de vital importancia que el ambiente o lugar donde se desarrolla el niño o la niña, casa o escuela, estuviese adaptado y preparado a sus necesidades vitales.